La inversión extranjera directa: la ruta hacia la prosperidad económica

Escrito por on 10/11/2023

En el presente año, Colombia redujo su déficit en cuenta corriente, en línea
con su proceso de desaceleración económica, al tiempo que tuvo unos
elevados flujos de financiación por concepto de inversión extranjera
directa.
El déficit en cuenta corriente se ubicó en 3,6% del PIB en el primer semestre
de 2023, un 43% menor que el registrado en el mismo periodo de 2022, y se
explicó por una moderación en el déficit de la balanza comercial de bienes y
servicios. Esta reducción se traduce en menores necesidades de
financiamiento para la economía colombiana, donde una de las fuentes de
financiación más importantes es la inversión extranjera directa (IED).
Aunque las necesidades de financiamiento se redujeron, la IED alcanzó en
el primer semestre 9.561 millones de dólares, el segundo registro más
elevado en la historia. Con esto, la IED representó el 5,8% del PIB y financió
aún más que la totalidad del déficit. Los sectores más partícipes fueron
petróleo y minería, que aportaron el 48% del total de la IED, seguidos de
otros sectores como servicios financieros, comercio y transporte.
El 67% de los flujos registrados en el primer semestre se causaron por
concepto de la IED distinta a reinversión de utilidades. Esto quiere decir que
alrededor de 7 de cada 10 dólares que ingresaron a la economía
colombiana por concepto de IED correspondieron a dinero adicional
proveniente directamente de los inversionistas extranjeros. Estos flujos de
dólares, benefician a la economía colombiana en la medida en que se
transforman en mayor actividad económica, mayor capacidad instalada,
mayor pago de impuestos y/o mayor producción en las empresas receptoras
de IED.
En conclusión, la IED es un vehículo poderoso para financiar la economía y
el crecimiento económico, y debemos aprovecharla al máximo. Mejorar el
atractivo de la economía es clave para mantener y aumentar los flujos de
IED, especialmente aquellos que corresponden a flujos extranjeros que
aumenten la capacidad productiva del país, y promover nuevos flujos a otros
sectores distintos a los tradicionalmente estratégicos para fortalecer la
estructura productiva, son objetivos deseables para nuestra economía en un
contexto de transición energética.


Reader's opinions

Deja un comentario

Your email address will not be published. Required fields are marked *



Actualmente suena

Title

Artist