Barranquilla, Bogotá, Bucaramanga, Cali, Cartagena, Chía, Manizales y Medellín

Bogotá, febrero 7 de 2025. –Dirigida por el ganador del premio Oscar, Danny Boyle (Slumdog Millionaire, 127 Horas), y protagonizada por dos estrellas internacionales, Benedict Cumberbatch como Víctor Frankenstein y Jonny Lee Miller como la criatura, FRANKENSTEIN es una de las puestas en escena más exitosas en la historia del National Theatre Live. Convertido en un clásico, esta adaptación teatral de la obra de Mary Shelley, explora temas atemporales como la responsabilidad científica, el abandono paternal y la naturaleza del bien y el mal.

La obra fue filmada en vivo en 2011, durante una exitosa temporada con entradas agotadas y, por el programa NT Live, se convirtió en un fenómeno internacional. Producida por el National Theatre, FRANKENSTEIN regresa a los cines de nuestro país, en únicas funciones el próximo sábado 15 y domingo 16 de febrero, a las 12:00 p.m., y Cine Colombia la proyectará en 13 salas seleccionadas de Bogotá, Cali, Medellín, Barranquilla, Bucaramanga, Cartagena, Manizales y Chía, con la más alta definición y subtítulos en español.

La obra
De apariencia infantil pero grotesca en su forma, la desconcertada criatura de Frankenstein es arrojada a un universo hostil por su creador horrorizado. Encontrando crueldad dondequiera que va, la criatura sin amigos, cada vez más desesperada y vengativa, decide rastrear a su creador y llegar a un acuerdo aterrador.

Con un comienzo poderoso que ha sido exaltado por la crítica, donde la criatura desnuda nace y emerge retorciéndose como en una metamorfosis: “los 10 minutos iniciales son impresionantes. De una extrañeza estimulante que jamás será igualada. Pero todavía habrá más que saborear”, Henry Hitchings del London Evening Standard-, esta cuidadosa adaptación de Nick Dear, pone el foco en la perturbada criatura de Frankenstein lanzada a un universo hostil por su malvado creador.

El gran despliegue de recursos es inigualable, por ello Dany Boyle aseguró que en esta producción se sintió como “un niño en tienda de juguetes”. El diseño escenográfico de Mark Tildesley presenta sorpresas como la locomotora a vapor que se toma el escenario, un espejo gigante plagado de bombillas que cuelga del techo y vibra al sonido de los relámpagos y una escenografía giratoria de la cual emergen inusuales elementos como césped real, fuego, humo y hasta una barca. La música electrónica de la banda británica Underworld y 18 actores en escena, se unen en un montaje estremecedor sobre el eterno duelo entre el bien y el mal. Un cuento clásico apasionante y profundamente perturbador.