Aumenta el número de casos de suicidio en Colombia Primeros auxilios emocionales, tan necesarios como los físicos
Escrito por Jose de Jesus Prieto on 01/11/2024
Bogotá, octubre de 2024. La Procuraduría General de la Nación entregó un preocupante panorama
sobre la situación de salud mental en Colombia. De acuerdo con cifras suministradas por el Instituto
Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, entre enero y julio de 2023 la tasa de suicidios se
incrementó en 15,73 % con respecto al mismo periodo de 2022, pasando de 1.564 a 1.810 casos.
El ser humano por naturaleza desea ayudar a sus seres queridos con sus inconvenientes cotidianos.
Si las personas estuvieran entrenadas para esto, podrían aplicar los Primeros Auxilios Psicológicos
(PAP) cuando fuera pertinente y posiblemente se podrían prevenir situaciones fuera de control.
Infortunadamente es común encontrar casos de personas que tuvieron una crisis emocional, y que
derivado de esa crisis terminaron acabando con sus vidas, con la de otro, o con un problema mental
grave.
“Infortunadamente es común encontrar casos de personas que tuvieron una crisis emocional, y que
derivado de esa crisis terminaron acabando con sus vidas, con la de otro, o con un problema mental
grave. Por esta razón, en el Consejo de Bogotá se encuentra una propuesta sobre la creación de
Brigadistas Emocionales que puedan brindar esos PAP en momentos pertinentes, para salvar la vida
a muchas personas y de esta manera permitirles encontrar la atención clínica que requieren, cuando
lo necesitan” afirma Camilo Espinosa, docente de la Facultad de Psicología, Universidad El Bosque.
La crisis emocional de una persona puede llegar a ser tan intensa que termina contagiando a otras
personas que se encuentren cerca. Por ejemplo, la evidencia demuestra que los suicidios funcionan
como un fenómeno epidemiológico, donde un caso de suicidio consumado desencadena otros casos
vulnerables. Así que el brigadista emocional que implementa PAP, y acompaña de manera exitosa la
crisis emocional de alguien que lo necesite; no solo está protegiendo a la persona con la que está
hablando directamente, sino que también previene que se generen problemas emocionales en otras
personas que se encuentren en el contexto inmediato.
“Igual a que en los primeros auxilios médicos; las crisis emocionales pueden ocurrir en cualquier
contexto, y por consiguiente esos PAP pueden/deben ser implementados en cualquier escenario
donde la crisis emocional se presente. Eso implicaría que la gran mayoría de los PAP no serán
implementados por profesionales de la salud mental entrenados, si no por primeros respondientes
que se encuentran en el contexto inmediato cuando ocurre una crisis. Por ejemplo, sería esperable
que policías, bomberos, paramédicos, profesores, personal administrativo, personal de atención al
cliente, entre otros, sean los que más usen los PAP y por ende, quienes se conviertan en brigadistas
emocionales” añade Espinosa.
Es necesario que el brigadista emocional haya pasado por un entrenamiento con profesionales de la
salud mental especialistas en PAP, donde le hayan indicado como responder en casos donde no solo
se haya evidenciado una alteración emocional, si no que se hayan presentado situaciones críticas
con consecuencias legales serias que requieran cuidado especial; como por ejemplo accidentes de
tránsito, intentos de homicidio u homicidio consumado, intentos de suicidio o suicidio consumado, y
agresiones sexuales o físicas, entre otras.