Aislamientos térmicos: una solución eficiente frente al Fenómeno del Niño
Escrito por Jose de Jesus Prieto on 17/08/2023
El Fenómeno del Niño es un evento climático que puede tener un impacto
significativo en los colombianos, especialmente en lo que respecta a la
disponibilidad de agua y los cambios en las condiciones climáticas. Durante
esta temporada, es común experimentar altas temperaturas, lo que lleva a un
mayor uso de electrodomésticos como el aire acondicionado y los ventiladores
para aliviar el calor. Sin embargo, esto puede resultar en un aumento en el
consumo de energía y en la factura eléctrica si no se cumplen las condiciones
ideales.
Por esta razón, en la actualidad, el sector de la construcción apuesta por el
desarrollo de edificaciones livianas y sustentables para ofrecer un mayor
bienestar al consumidor en comparación con la construcción tradicional. Estas
edificaciones se caracterizan por el uso de nuevos productos y tecnologías que
reducen el consumo de energía y maximizan la eficiencia energética.
Un ejemplo de esto es la utilización de sistemas de aislamiento térmico en las
estructuras para minimizar la transferencia de calor. Esto contribuye a
mantener una temperatura interior más estable y reduce la necesidad de utilizar
sistemas de ventilación durante un período prolongado, lo que a su vez genera
un mayor confort para los ocupantes y un ahorro de energía.
Así lo demuestra un estudio colaborativo titulado "Casa Fresca" realizado por la
multinacional francesa Saint-Gobain y su filial en Colombia, Fiberglass Isover y
la Universidad del Norte en Barranquilla. Este estudio tenía como objetivo
verificar el comportamiento de materiales aislantes de fibra de vidrio en
condiciones de altas temperaturas, específicamente en la Costa Atlántica, así
como evaluar la reducción en el consumo de energía en las construcciones.
Los resultados de la investigación demostraron que el uso de aislantes
térmicos de fibra de vidrio en regiones de climas cálidos puede reducir hasta en
un 77%* el consumo de energía. Además, se observó una mejora en la
eficiencia de los sistemas de ventilación, una disminución de hasta 4°C en la
temperatura interna, lo que contribuye a mantener una sensación de frescura y
comodidad en el interior de los hogares, así como su aporte a la sostenibilidad
y el cuidado del medio ambiente.
En un contexto de crisis climática, donde fenómenos como el Fenómeno del
Niño y las olas de calor extremas son cada vez más frecuentes, el confort
térmico se vuelve un aspecto fundamental para proporcionar bienestar y
proteger la salud de las personas. De acuerdo con la Organización Mundial de
la Salud, las altas temperaturas pueden ocasionar deshidratación severa,
accidentes cerebrovasculares y contribuir a la generación de coágulos, entre
otros; especialmente en personas de la tercera edad o con complicaciones
cardiovasculares, renales y psiquiátricas. Por lo tanto, garantizar un ambiente
con una temperatura adecuada se vuelve esencial para prevenir estos riesgos
y promover la salud en condiciones climáticas adversas.
En este sentido, la construcción sostenible, la instalación de aislamientos
térmicos y la elección adecuada de materiales juegan un papel crucial para
crear espacios más eficientes, saludables y respetuosos con el medio
ambiente. Al mantener el confort térmico en los hogares, se pueden mitigar los
efectos negativos de las altas temperaturas y reducir la necesidad de utilizar
sistemas de ventilación intensivos. Esto a su vez disminuye el consumo de
energía y las emisiones de gases de efecto invernadero, contribuyendo a la
lucha contra el cambio climático.